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lunes, 14 de septiembre de 2009

Casa María,

con curiosidad por cenar por primera vez en un restaurante de la Plaza Mayor nos adentramos en este local abierto hace poco. No es conocida esta plaza por sus manjares culinarios, mas bien por la aplicación descarada de la picaresca madrileña ante nuestros ingenuos visitantes a los cuales les vendemos paellas del paellador como si fuera un manjar y les rociamos con sangría para que pase mejor la dolorosa.








Bueno esta Casa de Comidas gallega es un sitio para disfrutar de la cocina. Tiene también una terraza fuera, pero al ser de aquí y no querer pasar calor optamos por la acogedora sala de la parte de arriba. El servicio fue agradable aunque un poco desformado.
Para hacernos una idea general optamos por pedir varios entrantes. La ensalada con queso de cabra y miel de la Alcarria (10€), un buen comienzo, con el queso de cabra gratinado y la bonísima miel de Alcarria. El único fallo era el salmón que no pegaba en el plato.


Las Croquetas de Pollo y Jamón (3€ unidad) El soldadito de Pavía (3€)La empanada casera de Doxi (3€). Todo a gran nivel casero, las croquetas muy jugosas, con mucho sabor y el punto de sal. Los Soldaditos son bacalao empanado, estaban en su punto. La empanada con una masa sabrosa y un relleno destacado.

De segundo nos fuimos al mar. El bonito del Norte en escabeche con tartar de tomate (17€). Servido frió, muy bien combinado con el tartar de tomate que le da frescura al plato.
El pixin “rape” con bilbaína de ajos tiernos (17€). Sobre una cama de patatas, el pescado al punto, buen plato pero sin apasionar.

De postre optamos por Patxaran pero solo tenían Zoco, imperdonable fallo. Tampoco tenían Crema de Orujo, raro para ser un gallego. Al final bebimos un orujo blanco. Los precios no son muy complicados ya que cuesta todo igual. Pescados y carnes son 17€, también los arroces.
Datos ubicacionales:
Plaza Mayor nº 23
Teléfono: 902 203 025 / 91 3 69 71 40
Precios: 16, 23 y 33 €
www.casamariaplazamayor.es
El resumen de todo esto es que se debería visitar este restaurante por la ilusión de comer en tal ubicación, y por disfrutar de un buena comida.
Estimados me despido,
M.L.

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