Lieu

Sin grandes ruidos de trompetas y júbilo  nos enteramos de este restaurante de nueva cuña que va cogiendo rodaje. Con el boceto de cocina de mercado-autor en la cabeza nos echamos a andar cerca de la Opera, para semiperdernos por esa zona tierra de nadie, que como pudimos confirmar alberga algún destello.

El local por fuera se presenta muy sobrio y elegante, e invita a entrar. Nada mas pasar la puerta nos encontramos a la izquierda la cocina moderna y metálica, pulcra y positivamente fría  Mirando de frente la recepción y la bodega. 

Lo primero una sonrisa y una mano indicativa hacia la sala. Un espacio acogedor con la mesa de servicio en el centro y un bello florero. Nos encontramos el local vació  por las horas tempranas y la temporada que no se caracteriza por llenar restaurantes. 

La esposa del cocinero Marielena nos trajo la carta de vino y nos aconsejo de tal manera que nos atrevimos optar por un Vino de Toro, Almirez. 

La camarera joven, italiana y encantadora, nos supe llevar por el Menú Gastronómico, y no es fácil con 2 pesados preguntones. A lo mejor, debido a la juventud del local, nos sirvieron varios entrantes como una suave crema, una curiosa magdalena de chorizo y  un pequeño aperitivo en tubitos de cristal. Amena idea para empezar a preparar la mesa.

- Langostinos, puré de aguacate y algas en ensalada con mango y pepino: Buen plato, de presentación muy limpia y excelente materia prima. Buena combinación de sabor aunque faltaba a mi gusto un toque de ácido.

- Merluza al horno, crema de arroz al azafrán y sofrito: brillante crema de arroz con suave sazón, un logrado sofrito de cama y el punto perfecto del pescado. Buen contraste el  arroz frito que nos da el crujiente.

- Silla de cordero confitado, pastel de batata y jugo de cordero: Muestra de una limada técnica  con sus depurada salsa y el glaseado de la carne. Buena pieza de silla de cordero deshuesada bien jugosa. Finísimo puré de batata muy logrado aportando dulzor.

- Bizcocho de Zanahoria, helado de queso y nueces caramelizadas.  Jugoso bizcocho, bien y fácilmente combinado con naranja. El helado aporta suntuosidad y cremosidad y un crujiente de nueces. Buen postre.

En general, nos fuimos con un buen sabor de boca, con un Menú de precio asequible, 50 €.  Los platos  logrados y trabajados, con buenas combinaciones y toques de experimentación. El servicio paciente y atento, aunque también hay que decir que sirvieron solo 2 mesas, lo cual nos apena. Tuvimos la suerte de hablar al final con el dueño/cocinero Daniele Scelza, un venezolano curtido en buenas cocinas, con aspecto buenachón y trato afable. Es un placer hablar con profesionales de la hostelería  que tienen la valentía de abrir sus propios proyectos y aportar con valentía.

Datos de interes:
Calle Amnistía 10
28013 Madrid
Telf.: 91 541 74 81
http://lieu.es/

Ya es hora de desaparecer, un saludo.

M.L.