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martes, 29 de enero de 2008

EL ABORÍGEN.
Estimados lectores espontáneos, situando mi presencia en el barrio del Cuartel del Conde Duque, descubrí este sitio sobrio y correcto.














La zona es tranquila y poco transitada, a no ser que haya concierto o alguna actividad cultural. La oferta de bares y restaurantes es muy ámplia alrededor del Conde Duque y hay un ambientillo curioso de gente curiosa y algún bohemio suelto, vamos que guiris hay pocos.

El local es bastante acogedor, con un pequeño comedor al fondo. La carta se basa en tostas varias, muy explotadas últimamente (a ver si se pasa la moda, o se las curran un poco más).


















Elegimos la de trigueros con jamón de pato sobre mayonesa. El plato estaba mal nombrado porque no eran trigueros, era un triguero. Personalmente tengo un rechazo al jamón de pato, con su sinsabor y gusto somnífero. Lo arreglé con un poco de Salmorejo por encima.

El Salmorejo estaba muy rico, aunque el jamón no se porque se echa crudo, en vez de darle un paseo por la sartén y que esté mas crujiente; pero vamos, que estaba muy rico, servido con pan tostado.
Y para finalizar unas verduras a la plancha, con su cebolla, sus calabacines, tomates y trigueros, bueno pero un poco insipido.

Una sorpresa me llevé al pedir el vino, al descubrir un vino autóctono llamado Puerta Cerrada, como nuestra adorable plaza en plena Latina, que ve nacer la indiscutible y venerada Cava Baja, meca de las calles culinarias de Madrid.
Increíble pero cierto: el vino estaba bueno, aunque bastante desconocidos los vinos de nuestra región, tienen mucha calidad.
La música era un poco desubicada temporalmente, entre Mónica Naranjo y Alex Ubago, pero yo me pillé cantando alguna canción. La camarera encantadora, muy maja, atenta, risueña,...

Dirección:
LIMON, 30

Tfn reservas:
91 541 89 92

El sitio no es nada del otro mundo, se come normal, pero pasé una velada agradable, así que para un apaño no esta mal.

A disfrutar

Deshollinator

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