Este es uno de los típicos sitios de la Latina, un poco escondido, con tradición, con su encanto, la gente variopinta, el camarero inglés rubito, la terraza veraniega, y una carta sabrosa y peculiar.
Empezando por la terraza, deciros que los camareros tienen que cruzar la calle cortada cada 2 por 3, lo cual le da un ambiente mas de barrio gritando al camarero a lo lejos y disfrutando de la tranquilidad de a calle cortada de Mancebos.
Al ser una parada en un tour de tapeo, solo probamos los boquerones. En general la carta es muy de mar, encontramos pocos platos con carne. Otro dia probare el Pate de Ave y a lo mejor el Tabouleh, aunque me lo pensaré porque las ensaladas árabes motivan mucho.
Los Boquerones estaban exquisitos, una muy buena idea y combinación.
Es una amplia bandeja, con boquerones cubiertos de una salsa con mostaza y unas aceitunas. Un boquerón encima de un trozo de pan, sublime. Plato en el que se nota que esta pensado, y destaca por la buenísima combinación de la mostaza, vinagre, alcaparras, etc.
Hay que volver y probar mas platos, pero con prisa que el verano se pasa rápido.
Un Saludo gente,
El Deshollinator
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